Just Another Wall

Entropía


Fumaba mirando todo lo que le permitía la vista desde ese octavo piso. Pensaba que a la noche le faltaban algunas nubes, así que creaba las suyas propias ayudado por el denso frío de las 03:47 y el muy buen tabaco del que tanto había presumido el anfitrión. Apoyaba su peso contra la baranda que lo separaba de la ciudad, era el ultimo hombre de pie en una incursión de una botella de whiskey de 20 años, un ron, una horda de cervezas y así sucesivamente hasta llegar a una caja de vino que no costaba más que un paquete de cigarrillos. Cambió la postura para descansar los brazos, uno de ellos fue a ayudar a sujetar el cigarro mientras daba una gran calada. Vio su blanco brazo sonrojado por el roce durante tanto tiempo con la baranda, se quedo en trance mirando como lentamente desaparecía la marca de su blanca piel sin ni siquiera fijarse en lo que ya solo eran frágiles ruinas de cenizas que se esfumaba de sus dedos.

-Es igual… algún día esa marca tan notoria que dejaste, desaparecerá- sacudió su mano y dejo volar libremente la colilla quemada… luego bebió una gran cantidad de vino que le devolvió la gravedad.

Confieso que al escribir esto me dio muchísimas ganas de un buen whiskey de malta y un paquete de Malboro y no al contrario. Al no tenerlos y con este antojo incontrolable… . No pude desarrollar otro argumento sino que tuve que darle punto final con prontitud. Beber, fumar y amar es un delicioso éxtasis. 

City

6 comentarios

  1. Goerge

    Pensé que se habían acabado los gays interesantes es un gusto leer tu prosa. ¿En qué ciudad vives? Veamonos por Skype.

    7 enero, 2014 en 23:43

    • Gracias por leerme Goerge, me alegra que hallaras gusto por lo que escribí. Aunque te apresuraste al afirmar que soy gay, no se si con intención directa de burla, igual no lo soy pero gracias. Si también escribes [y esta blog] no dudes en compartirlo se me da mejor lo de leer que de escribir.

      7 enero, 2014 en 23:58

  2. Hola Johnny, nos dejaste en medio del suspenso, igual me gusto, pero quisiera conocer el final 🙂

    8 enero, 2014 en 16:24

  3. Hola una terricola, bueno hace rato no se me daba algo tan corto y a la vez que me gustará. Aunque ahora estoy con algo de incertidumbre, si notas hay elementos que ya se convierten en factor común de mis entradas… he estado pensando mucho en variar. Debido a que el cigarrillo, el licor y el amar siempre terminan canalizando el proceso de escribir en algo muy similar. Un abrazo que llegue hasta el querido Uruguay.

    8 enero, 2014 en 17:04

    • entiendo, y confío en tu talento.
      llegó, gracias,
      otro hasta Cali,
      hasta pronto 🙂

      9 enero, 2014 en 15:34

  4. Fer

    El amar entre tantos placeres también se desvanece como el cigarrillo, el detalle es la llama…

    23 enero, 2014 en 12:24

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